Educación
NIÑOS PROBLEMAS SON REFLEJO DE PRESIONES Y ESCASA VIDA FAMILIAR
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Paula Leighton y Amalia Torres
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Escaso respeto mutuo entre compañeros de colegio y profesores, una creciente falta de vida familiar, padres con poco control ante las demandas de sus hijos por nuevos dispositivos tecnológicos, consumismo desatado y descontento de los niños frente a la excesiva presión por el rendimiento escolar. ¿Algo le suena conocido?
Éstas son sólo algunas características de los escolares británicos que menciona un crudo diagnóstico lanzado la semana pasada en ese país.
La investigación se considera el estudio más profundo sobre los 3,5 millones de niños de escuelas públicas hecho en Gran Bretaña en los últimos 40 años.
Según expertos chilenos, el sombrío panorama que describe el informe británico no dista mucho de nuestra realidad, aunque describe un escenario que hoy se aprecia más a nivel de adolescentes y preadolescentes.
"Pero si no se toman medidas a nivel de sociedad, los niños de primaria también actuarán así en un tiempo más", señala Raúl Zarzuri, sociólogo e investigador de temas juveniles del Centro de Estudios Socioculturales.
Aburridos y asustados
El estudio británico incluyó entrevistas a 750 padres, profesores, directores de escuelas y escolares. Las conductas antisociales entre los niños son la principal preocupación de los encuestados.
Además, los profesores alertaron sobre el frecuente acceso que los niños tienen en casa a Internet y consolas de juegos con material que va desde "inapropiado" a "pernicioso". Además, dicen, la televisión ha hecho que hoy sus ídolos sean las estrellas y celebridades de TV.
Los padres dijeron tener "poco control" sobre las demandas de sus hijos por aparatos electrónicos, como televisor propio, celulares, internet y consolas de juegos y criticaron el consumismo desatado entre los más jóvenes.
Los niños dijeron sentir temor a las pandillas de sus pares más grandes y se quejaron por la falta de áreas seguras para jugar. Además, calificaron como "atemorizante" y "estresante" la proliferación de exámenes de evaluación nacional. De hecho, el estudio advierte que la presión por las constantes pruebas escolares "está exacerbando las conductas antisociales en las aulas, con niños aburridos por la enseñanza que apunta al rendimiento en las pruebas y un currículo estrecho y rígido".
"Los niños están siendo forzados a crecer demasiado pronto y la perspectiva que tienen sobre la sociedad y el mundo en que habitarán es la de una peligrosidad creciente", dice el informe.
En Chile hay señales que preocupan: desde adolescentes individualistas, desadaptados conductualmente y agresivos, hasta aquellos que se involucran en actos vandálicos, matonaje escolar o consumo de sustancias.
"Muchas veces bajo esos rótulos hay una expresión de tristeza y un llamado de auxilio que pocas veces es leído de esa forma por los adultos", señala María Olga Herreros, psicóloga y docente de la U. Andrés Bello.
Es por eso, agrega, que más que responsabilizar a los niños de todos sus males, "debemos interrogarnos acerca de las condiciones que como sociedad les ofrecemos a nuestras familias para que realicen su tarea fundamental de crianza".
De hecho, la escasa vida familiar es otro elemento común entre la realidad británica y la chilena.
"Los padres son quienes entregan en primera instancia los referentes y patrones conductuales. Si este proceso no se produce, los niños crecen sin una noción clara de lo que es adecuado y no adecuado, les falta una concepción ética y moral y no tienen un control interno apropiado", explica Margarita Rojo, sicóloga del Instituto de Criminología de la Policía de Investigaciones.
Las extensas jornadas laborales y el ingreso de la mujer al trabajo ha hecho que muchos niños queden al cuidado de hermanos, nanas o personas con las que no tienen vínculos afectivos, mientras que otros simplemente pasan largas horas del día solos.
Los expertos coinciden en que para esta generación, la familia, los maestros y educadores se han ido reduciendo como espacios de encuentro y acogida, y el contacto entre pares empieza a hacerse más a través de los celulares y computadores.
"El Estado no cumple bien su función, la escuela tiene problemas, la Iglesia se ha retirado. Entonces la socialización hoy pasa por otros campos. Los adolescentes ya no conversan con el mundo adulto. Sólo sociabilizan entre ellos. Reproducen lo que ellos viven en su cotidianidad y que ven como 'normal'", dice Zarzuri.
Una posible salida, concluye María Olga Herreros, es "hacer una autocrítica como sociedad y reflexionar sobre esta realidad en conjunto entre profesores, padres y los propios niños. Hay que escuchar más a los niños. Pero no a través de discusiones de 'escogidos' que trabajen en comisiones especiales, sino a nivel de toda la comunidad".
Educación bajo la lupa
Un currículo educativo rígido y centrado en lograr buen rendimiento en las pruebas, más la falta de respeto mutua entre compañeros, son algunos problemas detectados por el estudio británico. Hay algunos paralelos con Chile. En Inglaterra, el 56% de los escolares ha sido víctima de matonaje, cifra que en Chile ronda el 45%. "Esas conductas son reflejo de la sociedad. En nuestro país la violencia se ha vuelto un mecanismo de relación social entre jóvenes y adolescentes; incluso el uso excesivo de garabatos es signo de violencia", dice Raúl Zarzuri. Para María Olga Herreros, "el creciente malestar visibilizado en la revolución pingüina apunta al fracaso del modelo educacional que como sociedad les ofrecemos a nuestros niños y adolescentes".
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ANÁLISIS
Primero me referiré al título: "Niños problema son reflejo de presiones y escasa vida familiar".
¿Qué es un niño problema?
Nuestra sociedad nos muestra hoy en día que un niño problema es aquel que molesta en clase, que no obedece, que se saca malas notas, no usa la ropa adecuada para el colegio, que es hiper activo, etc. y podemos nombrar muchos más; pero, ¿es un problema o nosotros los adultos lo encasillamos como tal? Años atrás (10 a 20 años) la educación fue muy estricta no solamente en el ámbito escolar, sino que también en el familiar, no podíamos opinar ni decir garabatos, obedecer siempre, escasamente teníamos opinión personal: ¿Es eso normal?. Es muy difícil saber cuáles son los cánones de "normalidad" en cuanto a un niño se refiere. En los colegios envían a los niños problema al psicólogo o simplemente lo expulsan, ya que es una solución fácil ¿qué estamos haciendo para dar solución a este problema y donde está la vocación de los profesores de hoy?
Los adultos estamos viviendo tan desordenados como los jóvenes corremos de un lado a otro, no tenemos tiempo para almorzar, nos importa más la parte económica y tecnológica, no hacemos vida familiar y por ende, no estamos entregando el tiempo necesario a nuestros hijos, entonces cabe preguntarse: ¿de quién es la responsabilidad?. A lo mejor es un grito de auxilio de los jóvenes y no los estamos escuchando.
"El adolescente de hoy debe ser ayudado a satisfacer sus propios requerimientos en el medio actual y a la luz de las realidades, tanto de su ambiente de adolescente inmediato como el del mundo adulto en el que se está intentando crecer" 1
¿Aburridos y Cansados?
¿Lo hemos preguntado lo mismo como padres, si nuestros jóvenes sienten lo mismo que nosotros aburridos y cansados.
Generalmente los jóvenes llegan a sus hogares después de una larga jornada escolar y se encuentran con una casa vacía o en ocasiones con una nana, la cual, no necesariamente satisfacerá las necesidades del joven, que es compartir lo sucedido en el día, querer cariño y comprensión o simplemente un beso, pero al no encontrarlo, se irá de inmediato a su dormitorio, prenderá el computador y se quedará instalado allí buscando maneras de poder llamar la atención de sus padres.
Los padres estamos insertos en un mundo laboral económico que al parecer nos satisface más que la vida familiar, por ello no debemos asombrarnos de las reacciones de nuestros hijos, al contrario, debemos estar pendientes para así poder ayudarlos y apoyarlos en todo lo que necesiten.
"¿Cómo podemos lograr que Francisco confíe en nosotros? Nunca sabemos en qué está pensando.Sabemos que no es feliz, pero no tenemos idea de lo que le pasa." 2
Actualidad
Nuestra realidad nos indica que los colegios expulsan a jóvenes y cancelan su matrícula por problemas conductuales, eso es la manera mas rápida para dar solución a un problema. No le estamos dando el tiempo necesario para poder ayudar al joven. Los profesores cada vez están mas estresados con alumnos " problemas", el dar ayuda requiere tiempo, dedicación, apoyo, y es eso lo que nuestra sociedad de hoy no esta dispuesta a entregar.
"Debemos ser constructivistas" (clase filosofía de la ed.06-06-2008)
Como conclusión
A la luz de los antecedentes , creo que aún hay esperanzas para nuestros niños. Siempre se ha dicho que la familia es el núcleo fundamental de la sociedad. Nosotros como padres debemos mirarnos y reflexionar acerca de cómo estamos realizando nuestra función. Somos autoexigentes en nuestros trabajos, pero lo somos como padres?. padres separados, que les dan a sus hijos sólo un par de horas el fin de semana, sintiéndose satisfechos, ya que dicen "les doy horas de calidad". sinceramente creo que eso es una gran mentira. Nuestros hijos nos necesitan todos los días. Nos quieren presentes siempre, aunque sea para estar tendidos en el suelo mirando las estrellas o compartiendo una fruta. Eso creo que es tiempo de calidad, estar todos los días con ellos, llamarlos por teléfono, escucharlos, mirarlos. Al fin y al cabo, que otra misión en esta vida puede ser más superior que entregarle a un pequeño Ser parte de nuestras vidas, ser el maestro y mentor de nuestros propios hijos, enseñarles que la vida es dura. Para tener cambios debemos hacer esfuerzos, no es fácil , pero debemos empezar.
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Bibliografías:
1.- Gordon, Thomas. PET padres eficaz y técnicamente preparados.
Diana, México, 1997, p. 37.
2.- Roberts, Dorothy M, Como trabajar con grupos de adolescentes,
Diana, México, 1971, p. 23.
3.- Vall, Priscilla, Niños inteligentes con problemas escolares,
Diana, México, 1987, p. 47.
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